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Ventajas y riesgos de la multitarea – ¿Aumenta la productividad?

Multitasking woman at work

Todos lo hemos hecho en algún momento: ¿Cuántas veces al día intentamos hacer multitarea? Respondemos a los mensajes de voz mientras recogemos a los niños, aprendemos un nuevo idioma mientras estamos atrapadas en un atasco, escuchamos un podcast mientras cocinamos,… La multitarea parece perfecta para aprovechar al máximo nuestro tiempo y hacer varias cosas a la vez. ¿Pero es eso realmente así? Veamos más de cerca las ventajas y los riesgos de la multitarea.

¿La multitarea nos ahorra tiempo?

Hay momentos en los que la multitarea no es un problema. Por ejemplo, cuando escuchamos música mientras ordenamos el apartamento o si leemos un buen libro cuando nos relajamos en la bañera. Y para ser sinceros, especialmente como padres, a menudo no podemos evitarlo: Ayudamos a la hija mayor a vestirse mientras le lavamos los dientes a la pequeña. Mientras conducimos cantamos canciones divertidas para entretenerlos o pensamos en qué cocinar para la cena y si tenemos que pasar por el supermercado. ¿Es eso un problema? No lo creo.

Como la consultora de estilo de vida Marlies Cohen señala:»Parece que la multitarea puede ahorrar tiempo, pero sólo cuando se trata de una tarea rutinaria que no requiere mucha potencia cerebral.»

Los riesgos de la Multitarea

Sin embargo, la multitarea también tiene sus lados oscuros: Todos hemos visto uno de los muchos videos en los que alguien está tan concentrado en su teléfono móvil que choca con una linterna o se cae al agua. Encuentro este fenómeno particularmente peligroso cuando la gente cruza la calle sin prestar atención a los semáforos o al tráfico. Nuestro cerebro está obviamente sobrecargado. Correr y escribir sigue funcionando al mismo tiempo, pero correr, escribir y prestar atención a los alrededores ya parece ser demasiado.

Pero esta no es la única razón por la que deberíamos cuestionar seriamente la multitarea: Los científicos han descubierto que somos significativamente menos eficientes haciendo varias cosas a la vez o cambiando constantemente de un lado a otro que cuando nos centramos en una cosa y la hacemos bien. También tiene sentido: imagínate que empiezas a leer un libro, luego alguien viene y te pregunta algo, empiezas de nuevo, pero primero tienes que encontrar el párrafo donde te detuviste y ya te olvidaste de qué iba el párrafo anterior, así que mejor te lo vuelves a leer… no parece ahorrar mucho tiempo hacer las dos cosas (leer y conversar) a la vez, ¿verdad? Según un estudio, podemos perder hasta el 40% de nuestra productividad por la multitarea.

Aparte de eso,  el hecho de estar siempre conectados también produce un estrés nunca antes conocido en nosotros. En lugar de dejar que nuestros pensamientos vaguen en un momento tranquilo (como en el tren, en la sala de espera del médico, cuando llevamos a los niños al parque) y ocuparnos de nosotros mismos, buscamos inmediatamente la manera de utilizar este tiempo «perdido» y, en la mayoría de los casos, sacamos el teléfono móvil inmediatamente. ¿Pero qué pasa si ya no tenemos ningún «momento de silencio» para escucharnos a nosotros mismos?  Según un estudio realizado por Clifford Nass de la Universidad de Stanford, las personas que realizan constantemente tareas múltiples no sólo tienen mayor dificultad para distinguir la información relevante de la irrelevante, sino que incluso cuando se centran en una sola tarea, sus cerebros son menos eficaces y eficientes que los cerebros de las personas que no realizan constantemente varias cosas a la vez. Debemos tener especial cuidado con los niños y los jóvenes: La multitarea y el uso constante de los smartphones pueden tener un impacto negativo significativo en su capacidad de concentración

Multitasking siendo padres

Otro factor importante es nuestra función de dar ejemplo. Si no queremos que nuestros hijos se sienten a la mesa con sus teléfonos en la mano, o que revisen sus mensajes mientras estamos intentando de tener una conversación seria con ellos, entonces debemos dar un buen ejemplo nosotros mismos. Yo soy la primera que tiene que aprender eso. Suelo responder brevemente a un mensaje, actualizo un estado en Social Media (es un momento), aunque en realidad es el horario en el que debería estar pasando tiempo exclusivo con las niñas – a menudo me sorprendo que no actuo como me gustaría. Y de repente mi hija está de pie delante de mí y me mira con una mirada muy impúdica: «¡Mamá!» Oops, me pillaste. Ya lo guardo.

¿Existe una estrategia óptima sobre cómo actuar? Supongo que no. No creo que sea un problema si usamos el ordenador o el smartphone o hacemos varias cosas a la vez cuando los niños están tranquilos y contentos y perdidos en sus juegos. Sin embargo, si les hemos prometido que miraremos un libro con ellos, haremos un dibujo con ellos o les ayudaremos con sus deberes,  debemos ser fieles a nuestra palabra, dejar de planchar y guardar los medios digitales para no ser molestados.

¿Multitarea Sí o No?

Como muchas veces, la respuesta es: depende. Hemos visto algunos ejemplos en los que tiene sentido, o incluso es necesario, hacer más de una cosa a la vez. Pero debemos tener cuidado de que no sean demasiadas.

Sin embargo, a veces también hace falta el contrario de la multitarea. Relajarse. Dejar que tus pensamientos corran libres. Tengo la sensación de que en el mundo de hoy, especialmente por los smartphones, esto es algo que hacemos muy poco. Responder a un mensaje aquí, actualizar nuestra lista de compras en el camino, revisar los correos electrónicos mientras estamos esperando a alguien… Es práctico, definitivamente, pero nos estamos convirtiendo cada vez más en esclavos de nuestros medios digitales.

Deberíamos tomarnos un tiempo todos los días para nosotras mismas. Cada una de nosotras tiene que ver por sí misma cómo integrar este tiempo en su día. ¿Por la mañana, cuando los niños todavía están durmiendo? ¿Por la noche? En el coche, cuando estamos en el camino a casa desde el trabajo? ¿Durante la ducha de la mañana? No tiene que ser mucho, unos minutos bastarán. Sólo tenemos que asegurarnos de que nos las tomamos.

También hay que tener en cuenta que podemos aumentar nuestra productividad de otras maneras en lugar de hacer malabares con varias cosas a la vez. Tengo pensado escribir un post sobre ello, así que vuelve pronto!

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